En Cales contamos con profesionales que brindan psicoterapia con Perspectiva de Género. Hoy en día y como parte de nuestra mirada, creemos que la visión del psicólogo frente a ciertas temáticas sociales importa a la hora de recurrir al consultorio.
Desde nuestra mirada entendemos al sujeto como un una interacción entre lo individual y lo social, alejándonos de concepciones individualista. Los movimientos sociales hacen y transforman a las personas, tanto a nuestros pacientes como a nuestros terapeutas.
¿Qué es la Perspectiva de Género?
Una perspectiva de género requiere un análisis que busca visibilizar y reconocer que hay distintos factores socioculturales y subjetivos sobre los modos de habitar los cuerpos. Una terapia desde una Perspectiva de Género entiende que estos complejos factores repercuten en la salud física, psicológica y social de las personas.
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¿Por qué una Perspectiva de Género en una terapia psicológica?
En el trabajo desde una Perspectiva de Género, se está advertido del fuerte peso del discurso social contemporáneo. Aquel que tiende y empuja hacia la normalización y homogenización de los cuerpos. Cuando se trata de la salud, los roles, las normas y las relaciones de género pueden actuar como factores de protección o de riesgo para las personas. Para alcanzar la meta de equidad en el campo de la salud, es partir del reconocimiento básico de que todxs no son iguales. Un espacio de Asistencia Psicológica, entonces, será un encuentro uno a uno, siempre distinto y nuevo cada vez.
¿Cuál es el objetivo del espacio terapéutico?
Un espacio de Asistencia Psicológica con Perspectiva de Género, propone ampliar la comprensión de los diversos conflictos vinculados a las inequidades entre los roles de género masculinos y femeninos.
Además ofrece un momento nuevo para buscar una manera más saludable y vivificante de estar para aquel que llega a consulta
¿Cómo trabaja un psicólogo con Perspectiva de Género?
La particularidad de tratamiento en todos los casos es singular, se construye un dispositivo de trabajo para cada quien, entendiendo que el dispositivo es un espacio a construir entre ambas personas: paciente y profesional y de acuerdo al motivo de consulta.
