Parafilia, preferencias sexuales inadecuadas

parafilias

Parafilia, es un término definido como “desviaciones sexuales”, son comportamientos no habituales para una sociedad, que un individuo realiza por placer. La persona que lo practica lo vive como algo que no lo puede controlar, su fuente de excitación puede ser un objeto, una situación fuera de lugar o un individuo atípico (p. ej. cadáver, animal, niño, etc.), hasta una persona adulta sin consentimiento.

El término parafilia es usado a partir del año 1987, en reemplazo del término “perversión sexual”, en una publicación del DSM-III-R (Manual Diagnóstico y estadístico de los Trastornos Mentales), coincidente con la modificación clínica dada en la novena edición de la CIE (CIE9MC)

Según investigaciones, la mayoría de las parafilias son más comunes en hombres que en mujeres. Es posible que existan razones biológicas, pero se desconoce la causa. Por lo general la conducta comienza durante la pubertad y frecuentemente disminuye cuando el individuo envejece.

Seguí leyendo para informarte qué tipos de parafilia existen y si existe tratamiento y cuáles son las más extrañas.

¿Cuándo una conducta sexual es considerado parafilia?

El hecho que existan gustos sexuales poco usuales socialmente, no indica que todos ellos sean parte de un trastorno parafílico, la patología aparece cuando la conducta sexual afecta significativamente la calidad de vida de la persona que la experimenta y/o de la víctima afectada.

Otra característica es que llegue a ser una conducta intensa y persistente, o que la práctica sexual sea la única fuente de placer del individuo.
De todas maneras es un término muy cuestionado a la hora de dar un diagnóstico, ya que la parafilia está sujeta a cuestiones sociales, culturales y religiosas de la época, las que determinan si una práctica es normal o patológica.

Por ejemplo en el pasado por el contexto dado de la época, la masturbación y el sexo oral estaban considerados como parafilia, siendo actualmente prácticas aceptadas y comunes socialmente.

Parafilia y trastorno parafílico

En el Manual Diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM),  publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), aclara que la presencia de una parafilia no es suficiente para dar con el diagnóstico de trastorno parafílico. Es decir, que un interés sexual atípico no necesariamente es un desorden mental.

Define parafilia como «cualquier interés sexual intenso y persistente que no sea el interés sexual en la estimulación genital o caricias preparatorias con las parejas humanas fenotípicamente normales, físicamente maduras, consintiendo» y define como trastorno parafílico, las parafilias que causan malestar o deterioro a la persona o daño a los demás.

En síntesis, para establecer el diagnóstico de trastorno parafílico, requiere que la conducta sexual implique malestar psicológico, lesiones o incluso la muerte de la otra persona. O que la persona afectada no quiera o sea incapaz de dar su consentimiento.

Trastornos Paráfilicos incluidos dentro de DSM-5

Existen diferentes tipos de parafilia, Aggrawal (2009) logró definir al menos 547 categorías distintas. Las mencionadas a continuación son 8, que son considerados trastornos, cobrando importancia al estar incluidas en el DSM-5:

Trastorno de vouyerismo

La persona mira una actividad sexual privada, sin ningún tipo de interacción con el/los sujeto/s, y sin el consentimiento de los participantes.

Trastorno de exhibicionismo

El sujeto realiza repetitivamente la exhibición pública de sus genitales, hecho que le provoca gran excitación. Inicia en la adolescencia.

Trastorno de froteurismo

Al sujeto le genera satisfacción el frotamiento de sus genitales con el cuerpo de otra persona desconocida.

Trastorno de masoquismo sexual

El dolor es el fin en sí mismo, tanto el emitirlo como recibirlo. Tal conducta indica alivio de la culpa generada por el sexo, donde es un requisito que el dolor recibido sea planeado para la obtención del placer.

Trastorno de sadismo sexual

La persona siente ansias sexuales que únicamente son satisfechas generando dolor a la otra persona.

Trastorno de pedofilia

Atracción sexual de adultos hacia niños menores de 13.  La persona con la parafilia debe tener al menos 16 años y tener al menos 5 años más que la víctima. Esta práctica es penada por ley, ya que afecta a la víctima significativamente.De perfil  manipulador, antisocial y sádico.

Trastorno de fetichismo

Incorporación en el juego sexual si o si de objetos zapatos, prenda de vestir olores que les excita y disfraces. Cualquier tipo de objeto o parte del cuerpo que no esté preparado para la estimulación sexual.

Trastorno travestismo

Se visten y actúan como el género contrario, pero lo hacen para ocasiones especiales, como una fiesta, ir de antro o por un espectáculo.
Algunos de estos trastornos parafílicos son considerados delito, como es el caso de la pedofilia, exhibicionismo, froutterismo y vouyerismo.
A su vez existen dos categorías genéricas, “otro trastorno parafílico especificado” y “Trastorno parafílico no especificado”. Dentro de ésta última se encuentran:

  • Necrofilia (activación sexual ante cadáveres)
  • Paracialismo (centro de atención sexual exclusivo en una parte de cuerpo)
  • Zoofilia (activación sexual ante animales)
  • Coprofilia (activación sexual ante heces)
  • Clismafilia (enemas)
  • Urofilia (orina)
  • Escatología telefónica (llamadas telefónicas obsenas)

Clasificación de parafilias

Los diferentes tipos de parafilias se pueden clasificar como no coercitivas, cuando existe consentimiento de la otra persona. Como sucede con el fetichismo, sadismo, masoquismo, travestismo, etc.

Mientras que hay otro grupo de parafilias llamadas coercitivas, donde involucran a la otra persona sin su consentimiento. Estas son consideradas un delito al atentar con la libertad sexual y debido a la victimización que se produce.

En este grupo podemos mencionar el exhibicionismo, voyeurismo, pedofilia y froteurismo.

Es importante aclarar que no todos los delincuentes sexuales presentan una parafilia ni todos los individuos con una parafilia han llevado a cabo un delito sexual.

Las parafilias más raras

Dentro de las inclinaciones más particulares para lograr llegar al orgasmo aquí te mostramos unas cuantas que darán que hablar en algún que otra reunión. Te presentamos las siguientes.

  • Hematofilia: Excitación a través de la sangre. Beben la sangre de sus parejas a través de cortes, una práctica peligrosa. Se encuentra dentro del subgénero del fetiche porque le agregan cuchillos a esta práctica.
  • Mecanofilia: Otra forma más de fetiche personas que sienten atracción sexual con su máquina (automóvil o vehículo cuatro ruedas).
  • Ursusagalamatofilia: También llamado peluchofilia aquí se fantasea o se desea mantener relaciones sexuales con personas vestidas de animales.
  • Macrofilia: Fantasear con mujeres gigantes.
  • Asfixiofilia: Excitación sexual por la pérdida de control de la habilidad de respirar. Auto estrangulación o permitir que la otra persona te estrangule.
  • Formicofilia: Excitación sexual de que ciertos insectos pequeños o pequeños animales muerdan piquen o caminen por sus parte erógenas.
  • Hibristofilia: Atracción sexual por personas peligrosas o que se encuentran al margen de la ley (delincuentes).
  • Hierofilia: Atracción sexual por personas con objetos sagrados por ejemplo cruces.
  • Coprofagia: Excitación sexual que se produce al ingerir excremento.
  • Ampotemnofilia: Excitación sexual por la idea de ser amputado.
  • Consuerofilia: Personas a las que les excita coserse zonas de la piel con aguja e hilo como única manera de obtener el clímax sexual.
  • Dacrifilia: Placer sexual que se siente al ver llorar a la pareja.
  • Dismorfofilia: Se excitan sexualmente con personas con deformidades.

Parafilia y cultura

A lo largo de la historia, algunas parafilias por cuestiones generacionales, han ido tomando mayor aceptación. Un claro ejemplo es la masturbación, que en el pasado era considerada una parafilia, hoy en día está visto como una práctica sexual aceptada. Para los millennials “los sentimientos de culpa han desaparecido para darle derecho al placer”.

En este marco, entra en debate que es considerado normal y aceptado socialmente y qué está encasillado como una parafilia. En un capítulo del DSM-5, se establece que un interés sexual atípico no necesariamente es un desorden mental, es decir, no toda parafilia es un trastorno parafílico.

El término “normal” entra en polémica, pero Pomeroy en 1965 hace una propuesta interesante cuando plantea aplicar 5 criterios diferentes para catalogar una conducta sexual como normal o anormal:

  • Estadístico
  • Filogenético o biológico.
  • Moral
  • Legal
  • Social

En base a los criterios antes mencionados, se realizó una tabla que sacó resultados en cuanto a la “normalidad” de algunas conductas sexuales, donde se concluye que la violación y la pedofilia son las dos prácticas unánimemente anormales.

La única conducta unánimemente normal es el sexo oral genital.

En el marco social, se han realizado investigaciones con estudiantes donde se ha concluido que el exhibicionismo, travestismo y fetichismo, resultan ser prácticas actualmente más aceptadas por los jóvenes, siendo el fetichismo una de las prácticas mejor considerada y la pedofilia rechazada en un 96%, calificada como ”muy criticable”, seguida del froteurismo.

Nuevas parafilias del siglo XXI

La aparición de nuevas tecnologías, proporciona los medios para que nuevas parafilias aparezcan. Entre las que se destacan:

  • Escatofilia telefónica: Es la realización de llamadas telefónicas obscenas a desconocidos o a un número específico para satisfacción o excitación sexual.
  • Chat-Escatofilia: Es muy parecida a la anterior pero con el uso de salas de chats en vez de teléfono.
  • Pornografía: Algunas categorías pornográficas. como la pornografía infantil entran en discusión si se debe incluir dentro de los trastornos parafilicos.

En general Internet abre el abanico para acceder sencillamente a otras parafilias.

La polirelación también entra en discusión ya que cada vez es más común entre hombres y mujeres de tener relaciones sexuales entre varias parejas. Y por último se encuentra la agorafilia, desarrollado por quienes mantienen coito en lugares públicos y son vistos.

Existen diferentes formas de terapia mencionadas a continuación:

A nivel general todas las terapias tienen el objetivo de:

  • Eliminar o reducir de la conducta parafílica.
  • Generar conducta sexuales más adaptadas.
  • Aumentar el repertorio de habilidades sociales.
  • Tratar las posibles psicopatologías que sean subyacentes al trastorno

Las distintas terapias psicológicas llegan a estos objetivos de diferentes formas, aca te dejamos algunas de las principales terapias:

  • Terapia psicoanalítica: Busca las razones y/o la historia del paciente, en que momento comenzó a tener esta conducta y que hacer con esos deseos en la actualidad
  • Terapia cognitiva-conductual: La identificación de distorsiones preceptúas y conceptuales es el primer paso en el tratamiento cognitivo de los trastornos parafílicos. Una vez que el paciente comprende esas distorsiones, se buscan estrategias para refutarlas y reemplazar las ideas por otras que corresponden mas a la realidad.Esta terapia busca apaciguar el comportamiento del paciente en sí, otras formas de llevar el placer sexual. La finalidad que tiene es modificar la manera de pensar, sentir y actuar en el área sexual del paciente.
  • Tratamiento farmacológico: El uso de sustancias químicas en el tratamiento suele ser reservado como terapia adjunta a la psicoterápia, mayormente en caso que la parafilia esté relacionada a un delito sexual. Se realiza el uso de medicamentos psicoáctivos, aunque ninguno de ellos es tan eficaz en reducir la problemática de la conducta parafílica como lo son las hormonas antiandrógenas. Todos éstos medicamentos tienen en común reducir el deseo sexual.

Es fundamental, el avance en las terapias con aquellas personas que padezcan algún trastorno parafilico, especialmente los que están definidos como delito. Cada intervención y tratamiento a pacientes con algún tipo de parafilia son muy diferentes, al igual que la valoración del riesgo de incidencia.

Fuentes
https://psicopedia.org/wp-content/uploads/2013/09/Parafilias-Evaluacion-y-Tratamiento.pdf
http://www.psyciencia.com/wp-content/uploads/2014/06/Parafilias-Evaluacion-y-Tratamiento.pdf
http://www.scielo.org.co/pdf/rcp/v47n1/0034-7450-rcp-47-01-00056.pdf